Evita las grasas trans.

Estas grasas trans son las que conocemos coloquialmente como las grasas "malas", estás pueden ser encontradas en diferentes alimentos como la margarina, helados, galletas, caramelos, pastelería industrial y demás alimentos, eliminándolos de tu dieta será mucho más fácil disminuir la grasa rebelde esto se debe a que las grasas trans son de fácil asimilación para nuestro cuerpo lo que quiere decir que cuando las consumimos el cuerpo va a formar más grasa mucho más fácilmente caso contrario con las grasas "buenas" o poli-insaturadas estás grasas se encuentran presentes en alimentos como el pescado, diferentes frutos secos,  en la mantequilla de maní y demás son de asimilación lenta por lo cual su consumo en vez de perjudicar nuestro objetivo acumulando más grasa va a colaborar con la salud y demás aspectos de nuestro cuerpo.

El mejor consejo para evitar estas grasas “malas” es que cada vez que compres un alimento te asegures a través de la observación de la etiqueta si incluye o no grasas trans estás generalmente están señaladas en la tabla nutricional. 

Come más fibra y más proteína

Estos dos son elementos muy importantes para nuestra dieta, sobre todo cuando estamos en un proceso de pérdida de grasa. Alimentos como el aguacate, las coles, las semillas, las moras. son sólo algunas de las fuentes de fibra soluble que es ideal para este objetivo. Al absorber agua la fibra soluble crea un tipo de gel que reduce la velocidad de los alimentos dentro del sistema digestivo lo que hace que la sensación de llenura dure por más tiempo. Por otro lado las proteínas presentes en alimentos cárnicos, productos lácteos, nueces, lentejas y demás alimentos son uno de los nutrientes más valiosos para nuestro cuerpo ya que es el principal combustible para la creación, sustento y mantenimiento de nuestra masa muscular, algo que debemos procurar no perder cuando estamos en un déficit calórico. También tienen la ventaja de que fomentan la sensación de llenura.

Más ejercicio

Es importante hacer más ejercicio sobre todo optar por la intensidad cuando queremos que nuestro porcentaje de grasa disminuya, lo ideal es combinar ejercicios aeróbicos con entrenamiento de resistencia, es decir, ejercicio cardiovascular y ejercicios con pesas. Así que se debe optar por el uso de circuitos de entrenamiento, cardio en intervalos y demás que contribuyan al gasto calorico. También puede ser interesante el consumo de algún suplemento que ayude a la quema grasa como por ejemplo la L-carnitina

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Beber menos alcohol

El alcohol especialmente el vino es beneficioso cuando se consume en pequeñas cantidades, pero como todo cuando se hace en exceso puede ser muy dañino, este contribuye de gran manera a la acumulación de grasa abdominal debido sobretodo a sus calorías "huecas" estas son calorías que se suman con un bajo aporte nutricional, reducir el consumo de alcohol podría llevar a tu cuerpo a metabolizar grasas y por ende eliminarlas, con esto logrando el abdomen más plano y una cintura más moldeada. No es necesario abandonarlo por completo si no limitar la cantidad se consume diariamente.

Evita el estrés

Cuando sufrimos de estrés el cuerpo desencadena las glándulas suprarrenales lo que hace que se produzca la hormona del estrés que es conocida como el cortisol. Luego de esto este elemento hace que aumente tu apetito lo cual claramente causará más hambre, lo que puede producir un consumo adicional de calorías que inevitablemente el cuerpo convertiría en tejido graso. 

Si puedes resumir esto en una frase sería: "el estrés puede hacer que ganes más grasa" entonces ¿qué puedes hacer?, es sencillo, si es posible evita los factores que causan estrés, fomenta tu felicidad y practica actividades que te permitan mantenerte enfocada como el yoga o la meditación.

Diles no a los alimentos azucarados

Este es uno de los errores más habituales y más fatales de las personas, los alimentos azucarados  como gaseosas, galletas, dulces y demás pueden conducir a varias enfermedades crónicas como la obesidad, enfermedades del corazón, diabetes y otras el aumento en la ingesta de azúcar puede estar relacionado con el aumento de peso que incluye un aumento también de grasa abdominal. 

La mejor solución es eliminarlos de tu dieta, pero si lo disfrutas no tienes porque hacerlo una disminución en la cantidad y frecuencia en el consumo de este tipo de alimentos puede ser un gran apoyo para conseguir el objetivo.

Dormir

Es uno de los hábitos que más se disfrutan, dormir entre 5 y 8 horas por noche es muy importante para la salud general, que incluye la pérdida de peso, como se ha demostrado en distintos estudios. Dormirse a la misma hora y despertarse a la misma hora todos los días, incluso los fines de semana, está relacionado a la reducción de grasa corporal. 

Los hábitos de sueño irregulares pueden hacer que tu cuerpo produzca cortisol qué puede causar, como lo vimos anteriormente, un aumento de tejido graso, por lo tanto es importante que crees una buena rutina para dormir y asegurarte que no sólo duermes, sino que estés cómodo para que tu sueño sea ininterrumpido y tranquilo.

En conclusión, todos estos factores que fueron mencionados juegan un papel conjunto, aunque uno solo puede ayudar, realizarlos simultáneamente va a llevarte a conseguir el porcentaje de grasa que deseas más rápidamente.